El liderazgo no es una cualidad innata que tengan unas pocas personas y otras no. Aunque mucha gente se pregunta: "¿Los líderes nacen o se hacen?", la mejor pregunta es: "¿Cómo puedo convertirme mañana en un líder mejor de lo que soy hoy?". La gente corriente demuestra un liderazgo excepcional todos los días, y todo el mundo tiene potencial para ser un líder eficaz.
Hemos recopilado consejos de ocho autores que saben un par de cosas sobre la excelencia en el liderazgo: Barry Posner, James M. Kouzes, Dana Perino, Bill George, Mark Divine, Marshall Goldsmith, John C. Maxwell y Jon Gordon. Sus enfoques le ayudarán a aprender a ser un mejor líder y a liberar todo su potencial.
Índice
- Consejos para comprenderse a sí mismo
- Crecer hacia el liderazgo
- Estrategias para encontrar su identidad de liderazgo
- Dos acciones para un liderazgo resiliente
- Sugerencia para líderes abrumados
- Cómo capacitar a los demás
- Consejos para liderar con energía
- Más información sobre cómo convertirse en un gran líder
Consejos para comprenderse a sí mismo
Según The Leadership Challenge, antes de poder liderar eficazmente a los demás, hay que tener un claro conocimiento de uno mismo. El crecimiento del liderazgo es esencialmente un proceso de autodesarrollo.
Para ser un mejor líder, Barry Posner y James M. Kouzes afirman que se necesita un sólido sistema de orientación interna. Cuando tienes una idea clara de tus propios valores y prioridades, puedes evaluar mejor los numerosos mensajes que recibes a diario, con consejos diversos (y a menudo contradictorios) sobre cómo emplear tu tiempo, en qué centrarte y qué elegir hacer.
Tu sistema de orientación interno procede de las lecciones que has aprendido de experiencias, retos y observaciones pasadas. Examine detenidamente estas lecciones para asegurarse de que están en consonancia con sus objetivos y los valores que desea mantener. Las investigaciones demuestran que reflexionar sobre tus experiencias cada día, aunque sólo sea durante unos minutos, puede mejorar significativamente tu rendimiento. Algunas preguntas que puedes hacerte son
- ¿Cuáles son mis mayores logros hasta la fecha y qué me impulsó a conseguirlos?
- ¿Qué valores quiero que guíen mis acciones?
- ¿Qué debo hacer para mejorar mis competencias o las de mi equipo?
- ¿Cuáles son los objetivos de mi organización o equipo para los próximos 10 años?
- ¿A qué puedo recurrir para tener valor ante los retos?
Crecer hacia el liderazgo
Dana Perino y otros expertos en Ojalá alguien me hubiera dicho... sostienen que se puede llegar a ser un gran líder centrándose en una visión y en su equipo. Esta sección explora tres consejos clave para los líderes:
- Elige liderar.
- Empieza por escuchar.
- Ofrezca opiniones sinceras.
Elige liderar
Paul Mauro, ex inspector de la policía de Nueva York, dice que hay que elegir entre la mera gestión -mantenerlas cosas en marcha y jugar sobre seguro- y el verdadero liderazgo, que implica abrir nuevos caminos y guiar a la gente hacia una visión. Si decides dirigir, piensa en quién te gustaría que te dirigiera y luego emula su estilo de liderazgo.
(Nota breve: Quizá quieras tener presente el consejo de Mauro antes de llegar a un puesto de liderazgo. Recuerda el consejo anterior de Perino de elegir al jefe, no el puesto. Si eliges bien, también estarás eligiendo un modelo de liderazgo positivo al que emular a medida que asciendes en el escalafón).
Además, diga a su equipo adónde quiere que vayan en lugar de dictarles cómo deben llegar. Esto permite a los equipos utilizar su ingenio e inspira a la gente a seguirle en lugar de limitarse a cumplir. Sin embargo, Mauro advierte de que la mayoría de la gente dice que quiere dirigir, pero al final se limita a gestionar porque se siente satisfecha con funciones seguras pero poco satisfactorias. Si sólo te dedicas a gestionar y no a liderar, quizá sea hora de buscar un nuevo puesto.
Empezar por escuchar
Perino escribe que escuchar sin distraerse es la habilidad de liderazgo más importante. Este tipo de escucha reduce la falta de comunicación y evita que tu equipo desarrolle una reticencia a hablar que puede conducir a errores costosos.
Para convertirse en un gran oyente, Perino sugiere los siguientes consejos:
- No hagas varias cosas a la vez mientras alguien habla. No puedes hacer bien dos cosas a la vez, así que pon el teléfono boca abajo sobre la mesa para evitar distracciones.
- No interrumpas a los demás ni termines sus pensamientos por ellos. Puedes incluso ponerte el pulgar y el índice delante de los labios para recordarte físicamente que no debes interrumpir.
- Pida y escuche activamente las opiniones de los demás, sobre todo en los momentos difíciles, cuando más se necesitan una dirección y unas estrategias claras.
Ofrezca opiniones sinceras
Por último, como líder, puedes apoyar la carrera de los demás. La periodista y escritora Salena Zito afirma que tus cumplidos pueden ser significativos y motivadores si la gente se los gana con trabajo duro y un alto nivel de exigencia. Debes proporcionar comentarios sinceros y aliento para aumentar la confianza, reforzar los buenos hábitos y fomentar un entorno orientado al crecimiento. Ofrece elogios sinceros y específicos cuando alguien lo haga bien, asegurándote de que tus cumplidos son considerados y merecidos.
Estrategias para encontrar su identidad de liderazgo
Hay muchas responsabilidades cuando se trata de liderazgo, y puede ser fácil caer en trampas que te conviertan en un mal líder. Pero según Bill George, hay dos pasos para optimizar tu liderazgo y poder alcanzar todo tu potencial.
Estrategia nº 1: Encuentre su función ideal
En Descubre tu verdadero norteBill George afirma que tu función ideal pondrá de manifiesto tus mejores aptitudes y te permitirá dedicar tiempo a cosas que te motivan. Para identificar este tipo de función y aprender a ser un mejor líder, reflexiona sobre tus puntos fuertes y tu motivación intrínseca (la motivación que viene de dentro, como el deseo de crear un mundo más equitativo). Si has hecho una introspección seria sobre tu propósito fundamental, es probable que ya tengas una buena idea del tipo de trabajo que te motiva intrínsecamente.
George pone el ejemplo de Warren Buffett como líder empresarial de éxito que encontró su papel ideal en el mundo de los negocios. Escribe que Buffett podría haber ganado mucho dinero trabajando como corredor de bolsa, centrándose en negociar y vender acciones para clientes con frecuencia para ganar una comisión por las operaciones. Sin embargo, Buffett sabía que éste no era el tipo de trabajo que le entusiasmaba ni lo que mejor se le daba. En su lugar, optó por dirigir su propia empresa de inversiones, donde podía poner en práctica su propia filosofía de inversión (invertir en empresas a largo plazo). Dirigir su propia empresa de inversión permitió a Buffett aprovechar tanto sus puntos fuertes como inversor como su motivación intrínseca para hacer un trabajo que le gusta.
Por el contrario, George advierte de que si estás en un puesto en el que estás motivado únicamente de forma extrínseca (por recompensas externas como un título prestigioso o un salario alto), corres el riesgo de caer en la trampa de sacrificar tu objetivo principal y tu ética por el beneficio material. Por ejemplo, si lo que te motiva principalmente es recibir elogios de tu jefe (en lugar de disfrutar con tu trabajo), podrías empezar a sacrificar la calidad para mantener un alto rendimiento y seguir recibiendo elogios. Este patrón podría continuar indefinidamente, aunque no esté alineado con tu propósito o valores fundamentales.
George dice que, en última instancia, las recompensas externas serán insatisfactorias porque no proceden de un deseo interior como lo hace tu propósito fundamental. Además, cuando uno se esfuerza por conseguir cosas como dinero, fama y poder, tiende a hacer comparaciones malsanas entre uno mismo y los demás, lo que provoca insatisfacción por mucho que se consiga. Por lo tanto, George afirma que el deseo de obtener recompensas externas siempre debe equilibrarse con el propósito central y las motivaciones intrínsecas.
Estrategia nº 2: Apoye a los miembros de su equipo
El siguiente consejo de George para un liderazgo fuerte es permitir que los miembros de su equipo hagan su mejor trabajo en lugar de intentar microgestionar u obligar a los demás a hacer lo que usted quiere. Sostiene que esto es importante porque las generaciones más jóvenes esperan que sus líderes les den respeto y autonomía sobre su trabajo. Por lo tanto, adoptar este estilo de liderazgo le ayudará a atraer empleados a su organización y a promover su objetivo principal.
Para poner en práctica este estilo de liderazgo orientado al equipo (lo que George denomina el cambio del "yo al nosotros"), debes establecer relaciones sólidas con tus empleados y utilizar la retroalimentación y la introspección para aumentar tu autoconciencia. George dice que para fortalecer tus relaciones con los miembros de tu equipo, tienes que ser vulnerable y mostrar respeto mutuo. Esto te da más credibilidad como líder y establece la dinámica de apoyo y no jerárquica que prefieren los empleados millennials. Por ejemplo, si estás proporcionando comentarios constructivos a un miembro del equipo sobre sus hábitos de trabajo, puedes decirle que tú también tuviste problemas con algunos de esos mismos comportamientos en el pasado y hacerle saber que le proporcionarás cualquier apoyo adicional que pueda necesitar para mejorar.
Además de fomentar las relaciones, solicitar opiniones es una forma importante de asegurarse de que está apoyando a su equipo lo mejor que puede. George aconseja procesar los comentarios de forma objetiva y hacer un seguimiento con introspección sobre tu comportamiento y cómo puedes mejorar realmente tus estrategias de cara al futuro. Afirma que el feedback es necesario para adaptar tu estilo de liderazgo a tus colegas y a las circunstancias. Por ejemplo, una persona que es nueva en tu sector puede querer más orientación, mientras que un empleado veterano puede preferir trabajar de forma más independiente. Por lo tanto, puede que necesites mantener conversaciones individuales para obtener feedback y comprender estas necesidades individuales.
Dos acciones para un liderazgo resiliente
En El camino del SEALMark Divine analiza las acciones que le ayudarán a ser un líder de éxito. Además, aprenderás a responder a factores que escapan a tu control porque el mundo laboral siempre está cambiando.
Acción 1: Establecer una misión clara y firme
Divine dice que cuando se inicia un nuevo negocio en el impredecible y siempre cambiante mundo laboral de hoy en día, se puede mitigar el riesgo de fracaso y aumentar la capacidad de recuperación de su organización teniendo una misión de empresa fuerte y alcanzable que le mantenga a usted y a su equipo centrados en su objetivo. Una misión clara hace que sea más fácil determinar hacia dónde dirigir sus recursos para no malgastarlos, lo que le ayuda a comprender cómo ser un gran líder y adaptarse a los nuevos cambios.
Una misión fuerte es:
- Sencillo y factible
- Importante para usted y su empresa
- Se adapta perfectamente a su tiempo, sus recursos y el talento de su equipo.
- Un buen retorno de la inversión (en otras palabras, el resultado hará que el tiempo y el dinero invertidos merezcan la pena).
- En el momento oportuno (nuevo y necesario ahora en el mercado)
- Fácil de comunicar a su equipo
Comunique sus objetivos con eficacia
Para dirigir su empresa con éxito, tiene que comunicar su misión con claridad a todas las personas que ayudan a ejecutarla. Cuando ayuda a su equipo a entender su misión y su papel en hacerla realidad, elimina la confusión sobre quién tiene que hacer qué. Esto permite que cada uno se centre en su trabajo y colabore para alcanzar el objetivo general.
Divine dice que la forma más eficaz de comunicar tu misión es enmarcarla en una historia convincente que sea fácil de entender. Por ejemplo, para contar la historia de un negocio que estás poniendo en marcha, habla de tu gran idea, el producto o servicio que quieres vender y el camino que tú y tu equipo tomaréis para hacerlo realidad. Informa a tu equipo de sus funciones, incluidos los pasos específicos que cada persona dará para ejecutar la misión y qué hacer si las cosas no salen según lo previsto.
Acción 2: Aceptar el cambio y adaptarse a él
Divine dice que para prosperar como líder en un panorama en constante evolución, hay que ser proactivo, no reactivo, para estar al tanto de los acontecimientos en el horizonte que podrían comprometer o mejorar su trabajo. Para ello:
1. Actuar con rapidez y decisión. Cuando se actúa con rapidez ante el cambio, no hay que obsesionarse con las cosas que no funcionan. Esto también le permite a usted y a su equipo identificar y aprovechar las oportunidades de vanguardia.
Para actuar con rapidez y decisión, fomente la confianza con su equipo y establezca procedimientos operativos normalizados. Generar confianza fomenta la asunción de riesgos, la resolución de problemas y la innovación. Estandarizar los aspectos rutinarios de la vida laboral -como los protocolos de comunicación en la oficina y las reuniones periódicas de planificación- agiliza las operaciones para que tu equipo pueda actuar con rapidez y afrontar con confianza los nuevos retos que vayan surgiendo.
2. Esté atento a las amenazas y oportunidades. Cuando estás siempre atento a lo que ocurre a tu alrededor, es menos probable que te pille desprevenido, eres más consciente de las oportunidades que puedes aprovechar y estás mejor preparado para predecir el próximo movimiento de tu competencia, lo que te ayudará a adelantarte a ellos y a liderar con éxito.
Para practicar la sintonía con el entorno, presta atención constantemente a lo que ocurre a tu alrededor cuando estés en espacios públicos. Por ejemplo, cuando estés en el supermercado, observa la sala y fíjate en las cosas que parezcan fuera de lo normal. ¿La mayoría de la gente va deprisa o despacio? ¿Hay alguien que destaque por ir deprisa?
Divine te recomienda que practiques regularmente esta habilidad en todos los espacios hasta que este estado elevado de conciencia forme parte de ti, y que luego lo apliques a tu negocio. Por ejemplo, observa el mercado que te rodea: ¿Tus competidores hacen las cosas de forma diferente a la habitual? ¿Pueden sus acciones afectar negativamente a tu trabajo o abrir oportunidades para un nuevo camino?
Cambiar de lenguaje para tener confianza
Divine afirma que reforzar su confianza le ayudará a desenvolverse con mayor eficacia en un mundo laboral en rápida evolución y a ser un líder más fuerte y con más éxito. Para ello, presta atención regularmente a tu lenguaje y elige palabras positivas y activas en lugar de palabras que evoquen imágenes y sentimientos de debilidad e incertidumbre, lo que socava tu confianza y la de los demás en ti.
Por ejemplo, no digas que "intentarás" hacer algo, que transmite duda. En lugar de eso, di que "definitivamente lograrás resultados". Esto infunde confianza en que lo conseguirás. Practícalo con regularidad para generar un sentimiento de confianza sostenido e inspirar la confianza de los demás en ti.
Dejar ir lo que no funciona
Divine afirma que en un mundo laboral VUCA, los líderes no pueden perder el tiempo con ideas, planes o productos y servicios obsoletos. En el momento en que te des cuenta de que un plan no funciona, asume un riesgo calculado y cambia a otro plan, aunque no esté totalmente formulado. Si su plan fracasa, considérelo una oportunidad para aprender. A continuación, haga borrón y cuenta nueva pronto y con frecuencia para aumentar la confianza en su capacidad para afrontar nuevos retos, avanzar e innovar con mayor rapidez y superar a los competidores que no hacen lo mismo.
Para sentirse cómodo cambiando de marcha sin un plan perfecto:
- Pruebe algo diferente de lo que haría normalmente.
- Si fracasas, piensa en cómo aplicar lo que has aprendido de esa experiencia a tu próximo intento.
- Inténtalo de nuevo, aplicando los cambios aprendidos.
- Repite este proceso hasta que lo consigas.
Sugerencia para líderes abrumados
La idea de cambiar tu comportamiento puede parecer increíblemente abrumadora, sobre todo si decides saltar inmediatamente de un extremo conductual a otro;por ejemplo, de ser un imbécil maleducado que hace comentarios destructivos todo el tiempo a ser un jefe benevolente que es increíblemente educado y amable. Hacer un cambio de personalidad tan grande puede parecer demasiado difícil de lograr o demasiado desalentador para siquiera intentarlo.
Para evitar sentirse abrumado, Marshall Goldsmith en What Got You Here Won't Get You There sugiere iniciar el proceso de cambio pasando a comportarse de forma neutral, es decir,de un modo que no sea ni perjudicial ni "bueno". En la práctica, esto significa eliminar tu mal comportamiento sin intentar sustituirlo instantáneamente por algo "mejor". Por ejemplo, puedes dejar de hacer comentarios destructivos a tus compañeros sin cambiar inmediatamente a hacer muchos comentarios amables.
Aunque "sólo" eliminar un mal comportamiento supone mucho trabajo, requiere mucho menos esfuerzo que interrumpir un comportamiento e introducir uno nuevo de golpe. Por tanto, es una perspectiva mucho menos abrumadora.
La única salvedad a esta opción es que no siempre es posible. Algunos comportamientos sencillamente no tienen una opción "neutra": o se mantiene el mal comportamiento o se cambia a su equivalente positivo. Tomemos el ejemplo del mal hábito de negarse a escuchar a los demás. La única forma de superar este mal comportamiento es empezar a escuchar activamente a los demás. En este caso, no existe una alternativa neutral o intermedia.
Si se encuentra en una situación en la que se siente abrumado ante la perspectiva de transformar su comportamiento pero no tiene ninguna opción "neutral" a la que recurrir, intente recordarse a sí mismo que, aunque el cambio que tiene por delante será difícil y le costará mucho esfuerzo, al final merecerá la pena. Con tiempo y trabajo duro , podrá eliminar con éxito su mal hábito e introducir su nuevo comportamiento más saludable.
Del mismo modo, no se presione para cambiar por completo su comportamiento de la noche a la mañana. Incluso si, al principio, sólo consigue poner en práctica su nuevo comportamiento más saludable una vez al día, eso no deja de ser un progreso. Se trata de una gran transformación. Tómese su tiempo.
Cómo capacitar a los demás
El liderazgo de un equipo es el factor clave que determina si rinde al máximo de su potencial y logra alcanzar su objetivo. Los buenos líderes capacitan a su equipo en lugar de frenarlo. Saben cómo inspirar y motivar a las personas, impulsar sus capacidades y darles poder para asumir responsabilidades.
Para crear un equipo con un liderazgo sólido, John C. Maxwell recomienda en Las 17 leyes indiscutibles del trabajo en equipo que dediques tiempo y energía a convertir a los miembros de tu equipo en líderes. El liderazgo no es una función fija que pertenezca a una sola persona, sino que es mejor que la desempeñen distintas personas en función de la situación. En lugar de que la misma persona tome decisiones para todas las tareas y proyectos, debe delegar el liderazgo en la persona con más experiencia y capacidades para la tarea en cuestión. Esto le permitirá optimizar el rendimiento de su equipo y aprovechar los puntos fuertes únicos de sus miembros.
Consejos para liderar con energía
Saber cómo ser un buen jefe de equipo consiste en comprender el poder de la positividad y la amabilidad. Cuando eres positivo y te preocupas de verdad por tu equipo, se producirá una mejora espectacular en la productividad de tu equipo. Siga leyendo para conocer los consejos de Jon Gordon sobre cómo liderar un equipo con gran energía desde El autobús de la energía.
Consejo 1: Dirija con el corazón
La clave para entender cómo ser un buen líder de equipo es liderar desde el corazón. El corazón es tu centro de poder, de donde fluye el liderazgo positivo.
El Instituto HeartMath afirma que el corazón comunica los sentimientos a las células de todo el cuerpo a través de su campo electromagnético. También proyecta esta energía más allá del cuerpo, a una distancia de hasta 3 metros. El cerebro también tiene un campo electromagnético, pero el del corazón es 5.000 veces más fuerte. (Nota breve: El Instituto HeartMath promueve la "medicina energética", que algunos investigadores han calificado de pseudociencia).
Esto significa que estamos emitiendo energía positiva o negativa desde nuestro corazón y que la gente lo percibe. Podemos sentir el corazón de la gente (sus verdaderos sentimientos) y saber si son sinceros o falsos. Del mismo modo, los empleados sintonizan con la energía de sus líderes.
La palabra emoción significa energía en movimiento; tu energía determina tu estado emocional. En lugar de dejar que las emociones negativas se apoderen de ti, tienes que tomar el control y cargarte de energía positiva.
Cuando eres feliz y positivo, los que te rodean también lo son. Tu felicidad es un regalo para los demás. En cambio, muchas personas intentan complacer a los demás y acaban sintiéndose infelices ellas mismas. Es mejor centrarse en sentirse bien y dejar que tu felicidad contagie a los demás.
Consejo 2: Tener un propósito más amplio
El último consejo para ser un buen líder de equipo es tener un propósito más amplio.
El propósito es el aditivo de combustible más importante para tu viaje. Conocer tu propósito te mantiene lleno de energía y evita que te agotes.
Pensemos en la historia de una visita del Presidente Lyndon Johnson a la NASA. Se dice que Johnson se encontró con un enérgico conserje en un pasillo y comentó que era el mejor conserje que había visto nunca. El hombre respondió que era más que un conserje, ya que trabajando en el equipo de la NASA había contribuido a la misión a la Luna. El conserje estaba motivado para sobresalir en su trabajo porque se sentía parte de un propósito y una misión mayores.
El propósito infunde pasión a tu vida cotidiana.
Muchas empresas y sus empleados carecen de este tipo de espíritu. Sus culturas matan la energía y el espíritu de las personas, lo que se traduce en baja moral, negatividad y escasa retención y rendimiento. Aunque los grandes proyectos pueden ser inspiradores, las empresas necesitan crear una energía duradera. Encuentre el propósito más importante antes del lanzamiento del producto y deje que alimente y siga llevando al equipo después del lanzamiento.
Si quiere saber más sobre el poder del propósito, considere esta historia sobre dos equipos de diseño de aviones. A un equipo se le encomendó la misión de construir el avión más avanzado del mundo y se le mostró un modelo de avión. Al otro equipo se le dividió en pequeños grupos y a cada grupo se le asignó un componente para diseñar; a los subgrupos no se les dio una misión general ni se les mostró un modelo del producto final. El equipo que tenía una misión y una visión del avión trabajó el doble de tiempo y esfuerzo y terminó en la mitad de tiempo que el otro grupo.
Más información sobre cómo convertirse en un gran líder
Si este artículo te ha parecido interesante y quieres profundizar aún más en cómo convertirte en un gran líder, puedes leer a continuación las guías completas de los libros mencionados:
- Ojalá alguien me hubiera dicho... por Dana Perino
- Descubra su verdadero norte por Bill George
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- Lo que te trajo aquí no te llevará allí por Marshall Goldsmith
- El reto del liderazgo de Barry Posner y James M. Kouzes
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