Crédito de la imagen: Lee Charlie/shutterstock.com
¿Te pone nervioso comenzar tu viaje creativo? Según Austin Kleon en Steal Like an Artist, esperar hasta sentirte «listo» es una trampa: descubres quién eres como artista al crear arte, no antes. La solución es sencilla: empieza a crear ahora, aunque seas principiante, y deja que el proceso te enseñe.
Kleon ofrece estrategias prácticas para empezar, elegir proyectos que te entusiasmen en lugar de limitarte a lo que ya sabes y combinar materiales físicos con herramientas digitales para que tus ideas sigan fluyendo. También explica por qué aceptar las limitaciones en realidad estimula la creatividad.
Índice
Empieza a crear
Una vez que hayas estudiado en profundidad tus influencias creativas, es hora de empezar a crear. Si eso te da miedo, no te preocupes, no eres el único: según Austin Kleon en Steal Like an Artist, muchos artistas sienten que no pueden crear obras de arte verdaderamente geniales hasta que no comprenden exactamente quiénes son como personas y como artistas. Sin embargo, él afirma que lo contrario es cierto: el proceso de crear arte es lo que te llevará a comprenderte a ti mismo. La única forma de convertirse en artista es crear arte, incluso si no eres un experto. Por lo tanto, debes lanzarte a ello en lugar de esperar hasta sentirte preparado.
(Nota breve: En La guerra del arte, Steven Pressfield sostiene que crear arte aunque no te sientas preparado tiene una ventaja adicional: separa a los artistas profesionales de los aficionados. No se refiere a «profesional» en el sentido de que te paguen por tu arte, sino que ser un artista profesional es una mentalidad. Es una insignia que se gana por comprometerse con el proceso creativo y seguir trabajando duro en él, incluso cuando el proceso es difícil o agotador. Esta lógica se hace eco de la afirmación de Kleon de que la única manera de convertirse en un verdadero artista es seguir creando arte).
Lanzarse directamente a crear tiene otra ventaja: según Kleon, te ayudará a evitar caer en la trampa del «síndrome del impostor», que es una sensación persistente de que no tienes el talento suficiente para triunfar. En lugar de hacer caso a estos sentimientos, comprométete a realizar un trabajo creativo independientemente de lo que pienses sobre tu talento.
(Nota breve: Kleon omite un componente crucial de la definición del síndrome del impostor: según la Asociación Americana de Psicología, se trata de un sentimiento de inferioridad que afecta a las «personas de alto rendimiento», es decir, a aquellas que muestran signos externos de éxito en su campo. Por lo tanto, si eres un artista profesional y dudas de tus habilidades, es posible que estés experimentando el síndrome del impostor, pero si estás probando por primera vez el trabajo creativo, es posible que simplemente estés experimentando la ansiedad que conlleva intentar algo nuevo).
Cubriremos los consejos prácticos de Kleon sobre cómo empezar a crear, incluyendo copiar, decidir qué hacer, combinar herramientas digitales y analógicas, y aceptar tus limitaciones.
Empieza copiando a otros artistas
Kleon cree que la mejor manera de iniciarse como artista es copiar el trabajo de tus héroes creativos. Hacer copias te ayuda a comprender cómo el creador original realizó su obra. Por ejemplo, si estás aprendiendo a pintar, podrías intentar recrear uno de los icónicos paisajes de Bob Ross. A medida que lo hagas, te darás cuenta de cómo aplica capas de color para crear profundidad en las montañas o cómo utiliza un pincel abanico para dar textura y suavidad a los árboles. Al copiar sus técnicas, empezarás a comprender por qué realiza determinados trazos o elige determinados colores. Así, cuando crees tu propia pintura original, tendrás una idea mucho más clara de cómo utilizar esas mismas técnicas en tu propio estilo.
Ten en cuenta que, cuando copias, tu trabajo inevitablemente quedará por debajo del original (después de todo, ningún pintor novato podría reproducir perfectamente a Bob Ross en su primer intento). Sin embargo, según Kleon, esto no es un fracaso, sino la fuente de tu fuerza. Las diferencias entre tus copias y el original son las que te hacen único como artista. Aprovecha esas diferencias para descubrir y desarrollar tu propia voz creativa. (Este paso también es crucial porque, si nunca añades nada único a tus copias, tu trabajo será solo una imitación del original en lugar de algo nuevo y transformador).
| Copiar funciona, pero no compares tu arte con el de los demás Las investigaciones respaldan la conclusión de Kleon de que estudiar el trabajo de otro artista mejora tanto la creatividad como la habilidad artística. En un estudio, los estudiantes que dedicaron tiempo a copiar los dibujos de un artista profesional produjeron posteriormente obras que los críticos de arte calificaron como más creativas y expresivas que las de los estudiantes que no comenzaron copiando. Por supuesto, como sugiere Kleon, imitar y aprender de la comparación es el punto de partida, pero no desarrollarás una voz o expresión auténticas a menos que te bases en las formas en que no te comparas con otros artistas. Sin embargo, compararte con otros artistas a veces puede ser desmoralizador si te centras en cómo tus habilidades se comparan con las de ellos. En The Gifts of Imperfection, Brené Brown reconoce este peligro y aconseja utilizar el proceso creativo para celebrar tu originalidad en lugar de compararte desfavorablemente. Brown destaca el hecho de que la expresión creativa es única para cada individuo, por lo que no tiene sentido comparar tu trabajo con el de los demás. En cambio, céntrate en el hecho de que nadie más podría hacer lo que tú has hecho porque nadie más ve el mundo exactamente como tú: tu expresión creativa es, literalmente, incomparable. |
Decida qué hacer
Una vez que tengas una idea de tu propia voz creativa, tendrás que decidir qué quieres crear. Kleon recomienda pensar en el tipo de arte que te inspira y tratar de hacerlo, aunque no sea lo que estás acostumbrado a hacer. Esto contradice el consejo habitual de «escribe (o dibuja, pinta o construye) lo que conoces», que según Kleon es la receta para crear arte aburrido.
(Nota breve: Stephen King, autor de más de 60 novelas y 200 relatos cortos, está de acuerdo con el consejo de Kleon de no tomarse demasiado al pie de la letra la frase «escribe sobre lo que sabes». En On Writing, King aconseja escribir sobre las verdades básicas que has aprendido de tus experiencias personales, no necesariamente sobre las experiencias en sí mismas. Por ejemplo, si has experimentado la sensación de nerviosismo al mudarte a una nueva ciudad, podrías escribir sobre un astronauta que se siente nervioso por ir al espacio: la situación es diferente, pero la verdad emocional subyacente es la misma).
Combinar herramientas digitales y analógicas
Una vez que hayas decidido qué crear, ¿cómo debes proceder para hacerlo? Si normalmente realizas todo tu trabajo de forma digital, Kleon aconseja alejarte del ordenador durante un tiempo e incorporar un componente analógico. Esto potenciará tu creatividad, ya que trabajar con materiales físicos te da la libertad de explorar posibilidades y cometer errores. Por el contrario, trabajar en un ordenador hace que sea demasiado fácil censurar tus ideas antes de poder explorarlas por completo. Por lo tanto, Kleon sostiene que solo debes usar el ordenador cuando llegues a la fase de edición de un proyecto creativo.
(Nota breve: si normalmente trabajas exclusivamente con un ordenador, incorporar materiales analógicos puede parecer una molestia innecesaria; por ejemplo, si eres escritor, puede que te resistas a escribir a mano porque luego tendrás que volver a teclearlo todo. Sin embargo, los estudios demuestran que escribir a mano te hace más creativo, ya que el acto físico de escribir a mano involucra regiones más amplias del cerebro que teclear en un teclado. Por eso muchos escritores de renombre (como Neil Gaiman, Stephen King y J. K. Rowling) redactan sus historias a mano antes de tocarlas en el ordenador).
Para animarte a utilizar materiales físicos, Kleon recomienda dividir tu espacio de trabajo en dos zonas: una para tu ordenador y cualquier otro equipo electrónico, y otra para cualquier material que utilices para crear (como bolígrafos y papel, arcilla o pinturas). Utiliza la zona analógica para explorar y generar ideas, y luego utiliza la zona digital para editar y ampliar tus ideas.
(Nota breve: el espacio de trabajo de Kleon cuenta con dos escritorios separados para el trabajo analógico y el digital; sin embargo, podemos deducir que la misma idea funcionaría con un solo escritorio si lo dividimos por la mitad. Si no tienes un espacio de trabajo designado, incluso podrías recrear la configuración reuniendo un kit portátil con diversos materiales analógicos; de esa manera, podrás cambiar fácilmente entre analógico y digital, sin importar dónde te sientes a trabajar ese día).
Acepta las limitaciones
Kleon ofrece un último consejo para el trabajo creativo: aprovecha las restricciones y limitaciones en tu beneficio. Disponer de recursos limitados estimula la creatividad, así que acoge el reto con entusiasmo. De hecho, si te encuentras en un bache creativo, puedes incluso añadir una limitación arbitraria (por ejemplo, retándote a ti mismo a cocinar un plato utilizando solo los ingredientes que ya tienes a mano). Como ventaja adicional, esto también hace que tu trabajo sea más interesante: la gente se maravillará de cómo has hecho tanto con tan poco.
(Nota breve: Kleon no explica por qué las limitaciones estimulan la creatividad, pero puede que sea porque las restricciones obligan al cerebro a ponerse en modo de resolución de problemas para encontrar una forma de sortearlas. De hecho, los estudios demuestran que las personas encuentran soluciones más creativas cuando tienen menos opciones disponibles).
Más información
Si quieres saber más sobre cómo empezar tu viaje creativo, puedes leer nuestra guía completa del libro de Kleon Steal Like an Artist.